NUNZIO SULPRIZIO, un joven santo
El 14 de octubre de 2018, Nunzio Sulprizio, un joven obrero fue canonizado, con el Papa Pablo VI y Monseñor Óscar Arnulfo Romero.
Tal vez no muy conocido afuera de Italia donde vivía de 1817 a 1836, él es un ejemplo de la santidad de los jóvenes, especialmente los jóvenes que han sufrido mucho.
Fue un huérfano, Sus padres murieron cuando tenía seis años. Su abuela materna lo crecía y le sembró en él un gran amor de Dios. Ella murió cuando él tenía nueve años.
Un tío lo recibió, pero lo forzó a trabajar en su herrería. Él, como muchos niños, tuvo que sufrir un trabajo duro. El tío también lo maltrataba, pegándole y regañándole cuando se puso enfermo.
Una herida en su pie se infectó con gangrena y sufrió mucho, aún los vecinos no lo permitieron usar la fuente de agua por temor de infectarse, pero él encontró otra fuente para lavarse las llagas.
En 1831 fue hospitalizado. En el hospital él manifestó su fe y su caridad a los otros pacientes y dio catequesis a los niños.
Otro tío le presentó al un coronel de Nápoles, Feliz Wochinger, que le procuró tratamientos. Pero, otra vez entró un hospital. Allá recibió su primera comunión.
Después de salir del hospital, el coronel lo acogió en su casa y fue como un padre para él. Fue un tiempo tranquilo en su vida, pero su salud se hizo peor y fue diagnosticado con un cáncer de huesos incurable.
Sufrió mucho, pero con una serenidad.
Una vez dijo, “Es muy poco lo que sufro, siempre que pueda salvar mi alma amando a Dios”.
Murió el 5 de mayo de 1836. Fue beatificado el 1 de diciembre de 1963 y fue declarado santo el 14 de octubre de 2018.
Él manifestó la santidad de Dios en su vida diaria.
En la Misa de su beatificación, el Papa San Pablo VI, pregunto, “¿Puede un joven ser santo? ¿Puede un obrero ser santo?”.
San Nunzio nos mostró que es posible.
Él puede ser para nosotros un ejemplo de la vida santa en medio de una vida muy difícil. Fue huérfano. Fue maltratado. Él sufrió el trabajo duro como muchos niños. Por su enfermedad, fue descartado por la gente de su aldea. Sufrió en su cuerpo, la gangrena y el cáncer de los huesos – pero con serenidad y fe.
Tal vez, podemos verlo como patrón de trabajadores, especialmente los herreros y los niños y jóvenes forzados a trabajo. También, podemos verlo como patrón de los huérfanos y de los niños y jóvenes maltratados. Son su tranquilidad en sus sufrimientos, él es un patrón de niños que sufren enfermedades difíciles y de todos los que sufren de cáncer.
Más que todo él puede mostrarles a los jóvenes su misión de ser testigos del Dios en su mundo. Como dijo el papa Santo Pablo VI, San Nunzio Sulprizio que la Juventus es un edad “buena para los grandes ideales, para generosos heroísmos, para las exigencias de pensamiento y acción”.
"El santo “Les demostrará que ustedes, jóvenes, podrán regenerar en ustedes mismos el mundo donde han sido llamados a vivir por la Providencia, y que a ustedes les toca, en primer lugar, consagrarse a la salvación de una sociedad que tiene precisamente necesidad de espíritus fuertes y decididos. [San Nunzio] les indicará las supremas palabras de Cristo, [que] la cruz, el sacrificio, son la salvación nuestra y la del mundo. Los jóvenes comprenden esta suprema vocación”.
San Nunzio, joven, trabajador, víctima de maltrato, enfermo del cáncer, ruega por nosotros.
Mural en la iglesia de Dulce Nombre de María |
Comments
Post a Comment